El Juzgado Sexto Penal Municipal con funciones de control de garantías de Barranquilla cobijó con detención domiciliaria a los seis funcionarios del Inpec capturados semanas atrás por concierto para delinquir con fines de extorsión y otros delitos. 

Los imputados hacen parte del grupo de funcionarios que laboran en la Cárcel Modelo de la capital del Atlántico. 

Los cobijados con la medida son Octavio Márquez Segura, de 36 años; Luis Yovani Tovar Ardila, de 49, quienes son inspectores; y los guardianes Harold Iván Ramos Bastidas, de 31; Darwin Manuel Fernández Salcedo y Mauricio Alejandro Acosta Acosta. 

Según las investigaciones de la Fiscalía, los funcionarios serían las personas que supuestamente llevaban celulares, licor y droga a los internos y cobraban por esos "beneficios" a los internos. Incluso, presuntamente recibían los pagos a través de Nequi y en otras ocasiones recibían el dinero en efectivo. 

El ingreso de celulares era usado por reclusos para realizar llamadas extorsivas.

Además, la información del ente acusador indica que al menos tres de los imputados habrían facilitado el ingreso de un arma de fuego para entregarlo a un interno con el fin de que atentara contra un capitán del Inpec que laboró en el penal y que le habría abierto varios procesos disciplinarios a los hoy imputados. Sin embargo, el atentado nunca se ejecutó. 

La Fiscalía le imputó a los funcionarios los delitos de concierto para delinquir con fines de extorsión, prevaricato por omisión, concusión, enriquecimiento ilícito, pero ninguno los aceptó. 

Según la Fiscalía, los funcionarios habrían logrado captar 300 millones de pesos producto del dinero que le exigían a los reclusos. Además, habrían omitido  sus funciones cuando otro recluso agredía a otro y no informaba a sus superiores.